PARÍS- El presidente francés, François Hollande, afirmó ayer que así como Francia protege y respeta a los musulmanes en el país, también exige por su parte que se respeten valores fundamentales como la libertad y la democracia.
En declaraciones hechas durante una visita al Instituto del Mundo Árabe, Hollande subrayó que el islam es absolutamente compatible con la democracia y que la Francia laicista garantiza el respeto a todas las religiones. Pero Francia, añadió, es un país con leyes, principios y valores.
“Entre ellos hay valores que no son ni serán nunca negociables, como la libertad y la democracia”, afirmó el mandatario socialista, que también aseguró que “los musulmanes son las primeras víctimas del fanatismo, del fundamentalismo y la intolerancia”. (DPA)